sábado, 25 de mayo de 2013

Vísteme despacio que tengo prisa. Cto de España de Acuatón Élite y Sub23



Que mejor manera de comenzar éste blog que con un Campeonato de España, en éste caso de Acuatlón, una prueba que siempre me había llamado la atención y no había corrido y que surgió de calentada una tarde hablando con el coach Adrián Vidaurreta que me animó a ir, unas llamadas a Cartagena y una vez asegurado el alojamiento estaba todo hecho, comenzaba una nueva aventura.

Son muchos los campeonatos de España que llevo encima, desde que comencé en el mundo del deporte e hice mi debut en un Cto. de España a los 9 años en Córdoba, Sub Campeón de España sub21… pero cuando te has cambiado de deporte todo es diferente jejeje Comenzaba mi debut en un Campeonato de España relacionado con Triatlón y la verdad que la ilusión era la misma que cuando tenía 9 años.
Me había desplazado el día antes hasta Cartagena donde haríamos noche junto a mi padre, viajecito duro. El viernes un poco de tour turístico conociendo la ciudad, entrenamiento de carrera, cena y a descansar que al día siguiente había que correr.

El escenario era perfecto, en la ciudad de Águilas (Murcia), sol y mucho calor, una playa preciosa y un ambiente de los que suben la motivación a cualquiera, muchísima gente y sólo se respiraba triatlón. Me acerco a recoger chip y dorsal, dorsal 78, tocará salir atrás ufff y una vez recogidos me voy a comer mientras descanso a ratos para ver correr a todas las categorías inferiores y grupos de edad.
Poco a poco se acerca la hora, comienza la carrera paralímpica (solo se puede decir que son increíbles), después la hora de las chicas élite y después el momento esperado, el élite masculino. Entro al área de transición a dejar el gorro y las gafas (donde comenzará mi odisea en carrera…) y me voy a calentar por el paseo.  La carrera de las chicas llega a su fin y ¡CÁMARA DE LLAMADAS ELITE MASCULINA!, de momento todo va bien, estoy muy seguro y tranquilo, 0 nervios, veo a mi lado a Gómez Noya, éste que sí que estaba tranquilo sacándose fotos con los chiquillos, poco a poco vamos entrando a la línea de salida, ¡78, Alcalde!, entro corriendo y me hago con un sitio bastante decente en el extremo derecho. En el resto de carreras se había podido ver que la salida era importantísima debido a que era muy estrecho y era muy difícil adelantar.

¡ACUALETAS PREPARADOS! ¡PISTOLETAZO! Comienza la carrera a toda leche entre unos cuantos empujones, consigo hacerme un sitio de la mitad en adelante, todo el mundo agrupado e imposible adelantar aunque me veo con fuerzas. Hay una zona en la que se abre la carretera un poco y aprovecho el exterior para adelantar unas cuantas posiciones e intento mantener hasta el final del primer sector de carrera. Sé que no estoy en mi mejor momento de forma pero voy bastante cómodo corriendo y en una buena posición.
Llegamos a la transición (momento clave de mi carrera), rápidamente me descalzo mientras me pongo el gorro y aquí el título de ésta entrada… “Vísteme despacio que tengo prisa”, decido hacer una transición lo más rápida posible, pero esos segundos que pude ganar se tradujeron en algún minuto en el agua… no me había colocado el gorro bien y me ocupaba bastante de la frente de tal manera que las gafas que había escogido para correr por la parte de arriba tocaban en el gorro y no acababan de sellar. Me tiro al agua y comienzo a nadar, adelanto algún puesto pero me entra un poco de agua en las gafas. Me siento bien excepto por el agua en las gafas pero de momento entro en un grupo en el que voy muy a gusto y cómodo, pero cada vez me entra más agua en las gafas y dejo de ver, hasta tal punto que tengo que pararme a quitar el agua de las gafas y colocarlas de nuevo, cuando hago esto veo que me había desviado del grupo al estar nadando a ciegas, y las gafas siguen sin sellar... así hasta un total de 4 veces, los ojos me picaban de la sal y cuando levantaba la cabeza no veía nada, asique la natación pasó de ser algo en lo que iba cómodo a ser un sufrimiento total y perder todas las posiciones. Salgo del agua y miro hacia atrás rápido y apenas veo gente, ¡mierda Richi, pero que cagada has hecho! Me recrimino. Pero bueno, queda correr aún, aunque cagadas de tal magnitudes entre triatletas de tanto nivel… se pagan y caro, consigo adelantar un par de puestos antes de entrar en meta y sacar conclusiones acerca de la carrera.

En cuanto a las conclusiones de ésta carrera, se puede sacar que puedo correr perfectamente con los grandes si estoy físicamente bien, aquí no llegaba en peor forma de lo que desearía y he tenido una buena actuación en carrera. Metros, metros y más metros de natación, y aprender de los errores cometidos. Si se quiere mejorar, creo que no hay nada como ser crítico con uno mismo, hay que aceptar los errores, las debilidades para poder corregirlas en futuras carreras y es que “el que asume el error está en una posición más avanzada hacia el éxito que el que sólo busca responsabilidades externas”.
Ha sido una gran experiencia aunque no haya conseguido el resultado esperado, pero ahora conozco lo que hay, sé que puedo estar perfectamente ahí, solo queda seguir trabajando duro, ya que es la única manera. El año que viene volveré y dando mucha más guerra. Ahora a pensar en Madrid y tomarme un mes de entrenamiento y exámenes que se presentan durillos.
Agradeceros a todos lo que habéis estado apoyándome no solo durante éste finde (que no habéis sido pocos :)) sino durante todo el año.

Un abrazo a tod@s!!

"Puedo aceptar un fallo, cualquiera puede fallar, pero no puedo aceptar el no intentarlo" (Michael Jordan)